El volante de un AGV (vehículo de guiado automático) es muy importante para el funcionamiento automatizado de almacenes logísticos, especialmente en pasajes estrechos o condiciones de terreno complejas, donde se requiere una alta precisión en la dirección. Recientemente, trabajamos con un cliente en Turquía para resolver su problema de volante inestable en terreno resbaladizo.
El sistema AGV de este cliente necesita mover mercancías pesadas en el almacén, y el suelo resbaladizo es una condición habitual. Después de la prueba, el cliente descubrió que el volante no era lo suficientemente preciso en suelo resbaladizo y la trayectoria de movimiento del AGV se desviaba. Alpar, un ingeniero de un cliente turco, dijo en una reunión: "Descubrimos que la dirección del AGV era inestable en suelo resbaladizo y, cuando la trayectoria se desviaba, se quedaba atascado en pasillos estrechos, lo que afectaba la eficiencia del trabajo".
Después de hablar con el cliente, descubrimos que el suelo resbaladizo no tenía suficiente fricción y que el volante tenía dificultades para mantener la estabilidad al girar, especialmente cuando estaba completamente cargado con 500 kg. El núcleo del problema era que el algoritmo de control no se adaptaba a los cambios en la fricción del suelo. Las preocupaciones del cliente son muy reales. Le pregunté al equipo: "¿Cómo puede el volante adaptarse a diferentes condiciones de fricción en tiempo real?". El director técnico sugirió agregar un mecanismo de retroalimentación multipunto y optimizar la lógica de control del servomotor para mejorar la velocidad de respuesta.
Después de la mejora, ajustamos el sistema de control del volante, recalibramos los parámetros de dirección y añadimos retroalimentación en tiempo real. El volante optimizado puede ajustar el ángulo de dirección según las condiciones de fricción del suelo, lo que mejora significativamente la estabilidad de marcha en terrenos resbaladizos. Después de la prueba, el error de dirección se redujo en un 30% y la trayectoria del AGV a plena carga fue más precisa.
Tras recibir los resultados de las pruebas, Alpa afirmó: "El volante optimizado funciona de forma muy estable y el problema de dirección en terrenos resbaladizos se ha solucionado por completo. Ahora nuestro AGV puede funcionar de forma eficiente". Su afirmación nos dejó satisfechos y esta cooperación demostró el efecto de la optimización técnica.
A través de este proyecto, hemos resuelto los problemas prácticos del cliente y mejorado el rendimiento del producto en condiciones de trabajo especiales. En el futuro, seguiremos optimizando nuestros productos y brindando a los clientes soluciones de volante confiables y eficientes.
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